domingo, 11 de diciembre de 2011

Comentario í: Deja vu


LOS entendidos lo llaman, un poco pedantemente, "deja vu'" y se dá tal., denominación a ese raro instante que en algún momento nos llega, de estar viviendo algo ya vivido, y que en ese fugaz espacio de tiempo, hay algo que se repite en nuestra existencia. Pasa pronto, y nos deja cierto desconcierto. Mucho se ha escrito sobre el tema, y las teorías van desde lo disparatado hasta lo científico; pero ninguna es aceptada como la causa real. Quienes creen en la transmigración de las almas, es decir, en el acto en que el alma de un fallecido se instala en un recién nacido, atribuyen el "dejá vu" a memorias heredadas de otra vida. Otros, creen que cuando duerme, en el hombre quedan sueltas algunas capacidades proféticas que nos hacen soñar cosas que pasarán en el futuro, y cuando ocurren, la conciencia no sabe a qué atribuirlas. Lo cierto es que muchas personas cuentan que, de repente, se detienen desconcertadas en cualquier momento de su vida, ven pasar un carro de caballo, o una vendedora de flores, o una procesión fúnebre, cualquier cosa, y tienen la vaga sensacion de haber vivido ya ese momento. Más de un estudioso, afirma que es una trampa de la memoria, que atesora un hecho en meandros tan ocultos que no nos damos cuenta de que nos está suministrando información y recuerdos que no le hemos pedido. Pero en contra de esa teoría, otros, más realistas; afirman que no puede ser un juego de la memoria, por la simple razón de que nunca, jamás, en la vida de un ser humano, se repite dos veces el mismo acontecimiento. De toda manera, el "dejá vu" existe, y su origen, su razón de ser, permanecerán por siempre en el misterio, y como todo misterio, será el punto de partida de todas las especulaciones, inclusive las esotéricas, aunque los contrarios a tales fantasías siempre se inclinarán por explicaciones más realistas, especialmente, cuando tienen en cuenta la premisa sentada de que el hombre de vida normal, sólo aprovecha el 10% de la potencia de su cerebro, de modo que queda un 90% de potencia que puede incluir poderes asombrosos y desconocidos para el hombre. Un un librito francés sobre el tema, de un enfermo que, fuera paciente de Jung, se apasionó tanto porque entonces se llamaba "ciencia analítica" que después de curado se hizo su discípulo, aparece una curiosa estadistica que el paciente discípulo se tomó el trabajo de estructurar, encontrando que el "dejá vu" se produce acentuadamente en personas de intensa vida espiritual o de gran actividad intelectual, y poco o casi nada, en gente de "mentalidad ordinaria". Un punto de partida como cualquier otro para empezar a investigar tan consternante fenómeno
Mario Halley Mora - MHM  

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